Tres poemas de amor por la poeta María Inés Iacometti
❤️ DESDE MÍ, HASTA VOS
Necesito mirarte
y no pensar oscuridades
en tus ojos.
Quiero poder confiar
en mis instintos
y encontrarte
como sos,
del otro lado de mis sueños.
Es imprescindible
la sinceridad
desde vos hacia mí,
desde mí hasta vos.
Porque he logrado
mi equilibrio emocional
(después de mucho andar)
puedo ofrecer
la armonía que viene
a sumarse a la tuya.
No la quiebres,
no la desperdicies,
no pretendas completarme.
No insistas en poseerme.
Yo me entrego al amor
con amor y por amor
cuando mi corazón lo decide.
Estoy lista para cuidar
tus sueños
y también
para desvelarte
pero prescindo de vos
si el vuelo no es de a dos
sincrónico
armónico
rítmico
pacífico.
Me nombro río
que puede canalizarse
en tus arterias
o inundarte
según el tiempo y la devoción
que nos procuremos.
Soy el llanto y el consuelo.
La brisa que calma
y el volcán que enciende.
Amame, valorame, creeme,
acompañame, seguime,
proponeme, respetame.
Te amo, te escucho, te pienso,
te sueño, te aprendo,
te siento, te enseño.
Soy todo. Sos todo.
Juntos,
somos milagro.
Necesito mirarte
y no pensar oscuridades
en tus ojos.
Quiero poder confiar
en mis instintos
y encontrarte
como sos,
del otro lado de mis sueños.
Es imprescindible
la sinceridad
desde vos hacia mí,
desde mí hasta vos.
Porque he logrado
mi equilibrio emocional
(después de mucho andar)
puedo ofrecer
la armonía que viene
a sumarse a la tuya.
No la quiebres,
no la desperdicies,
no pretendas completarme.
No insistas en poseerme.
Yo me entrego al amor
con amor y por amor
cuando mi corazón lo decide.
Estoy lista para cuidar
tus sueños
y también
para desvelarte
pero prescindo de vos
si el vuelo no es de a dos
sincrónico
armónico
rítmico
pacífico.
Me nombro río
que puede canalizarse
en tus arterias
o inundarte
según el tiempo y la devoción
que nos procuremos.
Soy el llanto y el consuelo.
La brisa que calma
y el volcán que enciende.
Amame, valorame, creeme,
acompañame, seguime,
proponeme, respetame.
Te amo, te escucho, te pienso,
te sueño, te aprendo,
te siento, te enseño.
Soy todo. Sos todo.
Juntos,
somos milagro.
©María Inés Iacometti.
❤️ TIEMPO DE VIVIR
¿Qué magia te sostiene
con vida en esta vida?
¿Qué parte de tu esencia
se queda enhiesta en mí?
Podrías derrumbarte
con solo una caricia.
Podrías naufragarme
esperas, y gemir
que todo lo luchaste
que todo lo has brindado
que ya no es este tiempo
propicio de vivir.
Igual me das sonrisas
de verde entre tus ramas
regalo generoso
de historias que en el fin
se encuentran silenciosas
y mecen un mañana
que no saben si acaso
lograran resistir.
Un día fue mi padre
sonriente hasta el esfuerzo
de no mostrar raíces
expuestas y sin fe,
quien esperó quietito
el ulular del viento
en una orilla tenue
de triste atardecer.
Mi padre como el árbol
no quiso ser vencido
y prodigó sus hojas
su sombra, su saber.
Se fue sin estruendosos
adioses que en el llanto
hicieran más difícil
partir a florecer.
Y así será tu día
-lo quiero suponer-
de renunciar al suelo
que tanto te ofreció
y desplegar tus alas
al máximo camino
el que te ha preparado
el mismo Creador.
©María Inés Iacometti.
❤️ TIEMPO DE VIVIR
¿Qué magia te sostiene
con vida en esta vida?
¿Qué parte de tu esencia
se queda enhiesta en mí?
Podrías derrumbarte
con solo una caricia.
Podrías naufragarme
esperas, y gemir
que todo lo luchaste
que todo lo has brindado
que ya no es este tiempo
propicio de vivir.
Igual me das sonrisas
de verde entre tus ramas
regalo generoso
de historias que en el fin
se encuentran silenciosas
y mecen un mañana
que no saben si acaso
lograran resistir.
Un día fue mi padre
sonriente hasta el esfuerzo
de no mostrar raíces
expuestas y sin fe,
quien esperó quietito
el ulular del viento
en una orilla tenue
de triste atardecer.
Mi padre como el árbol
no quiso ser vencido
y prodigó sus hojas
su sombra, su saber.
Se fue sin estruendosos
adioses que en el llanto
hicieran más difícil
partir a florecer.
Y así será tu día
-lo quiero suponer-
de renunciar al suelo
que tanto te ofreció
y desplegar tus alas
al máximo camino
el que te ha preparado
el mismo Creador.
©María Inés Iacometti.
❤️ Sin interrumpirte
La canción decía
"no me dejes desaparecer"
y de pronto me encontré
pidiéndote lo mismo.
No me dejes desaparecer.
Quiero quedarme en tus huesos.
Quiero sentir que te vibro
en el universo conciso
de cada inspiración.
Saber que las estrellas
no están para contarlas
sino para amarlas
desde la injusticia
de verlas recién ahora
cuando llevan miles de años
ya muertas.
No me dejes desaparecer...
Aunque tenga preparada la mortaja
o me pueble alguna enfermedad
que me corroa.
Todos los días.
Todos los tiempos.
No me dejes desaparecer de tu alma
de tu cuerpo
de tu olor, de tu río
de tu calma con esperas innecesarias
de bravuras sin sentido.
Quiero quedarme en el fragor de tus luchas
y saber cuánto hay de cierto
en cada uno de tus sueños.
Embeberme con tus copas
y renacerte en abrazos
no estrenados.
Todos nuevos.
Mi corazón, ávido de vos,
te extraña
indiscutiblemente.
Cómo voy a hacer la confesión
-absurda confesión-
de amarte hasta el último momento
si hoy te estoy rogando:
No me dejes desaparecer...
En tus pensares
¡no hay postrer instante!
Me vuelvo de hierro
de menta
de fuego
de árbol
de agua
de canto
de hielo
de lágrima
y no quiero extinguirme
quiero ser más que el silencio
sin interrumpirte.
No me des la intemperie de tu amor
que de a ratos soy pequeña
intermitente en hazañas
pero vuelvo
como en olas
cuando tu soledad es tanta
que se desliza hasta mí
y precisa de mis alas.
Soy de piedra y de nube
soy de escarcha y semilla.
No me dejes desaparecer.
Nunca me pierdas de vista.
Quiero apelmazarme en tu historia
y habitarte
como un ocaso perenne
de esos que vimos juntos
de esos, que nos comprenden.
No importa que me lo digas
importa que no me sueltes.
No me dejes desaparecer
de vos, de tu piel,
de tu risa, de tu mente...
"no me dejes desaparecer"
y de pronto me encontré
pidiéndote lo mismo.
No me dejes desaparecer.
Quiero quedarme en tus huesos.
Quiero sentir que te vibro
en el universo conciso
de cada inspiración.
Saber que las estrellas
no están para contarlas
sino para amarlas
desde la injusticia
de verlas recién ahora
cuando llevan miles de años
ya muertas.
No me dejes desaparecer...
Aunque tenga preparada la mortaja
o me pueble alguna enfermedad
que me corroa.
Todos los días.
Todos los tiempos.
No me dejes desaparecer de tu alma
de tu cuerpo
de tu olor, de tu río
de tu calma con esperas innecesarias
de bravuras sin sentido.
Quiero quedarme en el fragor de tus luchas
y saber cuánto hay de cierto
en cada uno de tus sueños.
Embeberme con tus copas
y renacerte en abrazos
no estrenados.
Todos nuevos.
Mi corazón, ávido de vos,
te extraña
indiscutiblemente.
Cómo voy a hacer la confesión
-absurda confesión-
de amarte hasta el último momento
si hoy te estoy rogando:
No me dejes desaparecer...
En tus pensares
¡no hay postrer instante!
Me vuelvo de hierro
de menta
de fuego
de árbol
de agua
de canto
de hielo
de lágrima
y no quiero extinguirme
quiero ser más que el silencio
sin interrumpirte.
No me des la intemperie de tu amor
que de a ratos soy pequeña
intermitente en hazañas
pero vuelvo
como en olas
cuando tu soledad es tanta
que se desliza hasta mí
y precisa de mis alas.
Soy de piedra y de nube
soy de escarcha y semilla.
No me dejes desaparecer.
Nunca me pierdas de vista.
Quiero apelmazarme en tu historia
y habitarte
como un ocaso perenne
de esos que vimos juntos
de esos, que nos comprenden.
No importa que me lo digas
importa que no me sueltes.
No me dejes desaparecer
de vos, de tu piel,
de tu risa, de tu mente...
©María Inés Iacometti
Biografía:
Nacida en Santa Fe, Argentina. Poeta, escritora,cantante, prologuista.Autodidacta. Co-Fundadora y Coordinadora General de los espacios culturales internacionales: “ARTE POÉTICA LATINOAMERICANA” e “INFINITAS CONEXIONES – Amistad en Poesía”.
Miembro de diversos colectivos literarios locales, nacionales e internacionales.
Integrante de equipos interdisciplinarios a favor de la lecto-escritura creativa.
Recibió varios premios y reconocimientos, regionales, nacionales e internacionales.
Integra una decena de antologías del país y el extranjero.
Publicó: "Desde mi alma al papel..." (poemario propio disponible en Amazon), "Zona Poética" (poemario con las poetas santafesinas Ana María Paris y Gladys Frutos Faloni) y "Poemas al mar" (poemario con el poeta vasco José Manuel Sáiz – disponible en Amazon).
Además publicó "En el río del tiempo" (novela corta).
Hermosos poemas. Felicitaciones!
ResponderEliminarMuchas gracias. Un gusto saludarte.
Eliminar!Felicidades! Has hecho que tus versos habiten en mi. Preciosoooo
ResponderEliminarMuchas gracias. Qué privilegio el mío.
EliminarExcelentes !.felicidades por tu poesia de alto vuelo, limpia y que cumple su cometido: Llega al alma
ResponderEliminarMisión cumplida entonces. Muchas gracias.
EliminarSe siente tu esencia Poética, el vibrar y las características que la distinguen, tu amada patria en tu versar.
ResponderEliminarEsa soy yo querida amiga, bien de acá. De mí río y mi llanura verde. Con mi trato de "vos" en el alma. Gracias por estar.
EliminarWuauuuu...hermosos poemas.Felicitaciones
ResponderEliminarGracias por tu tiempo y atención. Un gusto saludarte. Abrazo.
EliminarBellos poemas mi querida María Inés... Felicitaciones amiga. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias. Qué bueno que sean de tu agrado. Un abrazo.
EliminarMuy bellos tus poemas, felicidades. ¡Muchos éxitos! ♥
ResponderEliminarFelicidades y éxitos 🙌
ResponderEliminarMe encantan tus poemas María Inés, son joyas literarias.... Felicitaciones 🎉 👏👏👏🌷
ResponderEliminarHermosa y honesta poesía, como también profunda. Siento, sin conocerte que me hace un retrato de vos. Felicitaciones por ser bendecida con el don de dominar la palabra escrita. Abrazos desde el corazón de poeta a poeta. De Venezuela María Milagros sabetta badra.
ResponderEliminar